Cuando se trata del cuidado del rostro, no todo lo que brilla en redes sociales está respaldado por evidencia científica. Hoy más que nunca, la piel exige tratamientos efectivos que combinen tecnología, ciencia y resultados visibles.
Mantener viva la pasión en una relación a largo plazo no es cuestión de suerte, sino de compromiso diario y conexión emocional. Con el paso del tiempo, la rutina puede adormecer los gestos que alguna vez encendieron la chispa inicial.
En Prima Donna celebramos la conexión entre lo que sientes y cómo lo comunicas. No se trata de seguir una moda olfativa, sino de identificar qué perfume te hace sentir tú. Porque la elección correcta no solo te acompaña, también te empodera.
Incluir un protector solar con amplio espectro, mínimo FPS 30, después de tu crema hidratante, no solo cuida tu piel, también previene signos visibles de envejecimiento. En Prima Donna sabemos que el autocuidado comienza con la prevención.
Decir “no” no te hace egoísta, te hace consciente. Aprender a establecer límites saludables es un acto de amor propio que fortalece tu bienestar emocional y mental. Muchas veces decimos “sí” por miedo al rechazo o por complacer a los demás,
Comienza siempre con una piel bien hidratada; esto no solo mejora el acabado del maquillaje, sino que forma parte del mejor cuidado para una piel sana y luminosa. La clave está en entender tu rostro y trabajar con él, no contra él.
Cada tipo de piel responde de forma distinta a ingredientes, rutinas y productos, por eso es fundamental entender sus necesidades específicas adaptar los cuidados diarios en consecuencia.
Enfrentar momentos complicados es parte de la vida, pero la forma en que decidimos atravesarlos puede marcar toda la diferencia. Cultivar una mentalidad positiva no significa ignorar lo que duele
Una piel radiante y un cabello luminoso no solo dependen de los productos que aplicamos por fuera, sino también de lo que consumimos a diario. Una alimentación balanceada puede ser tu mejor aliada.