Edición disponible octubre 2025

Aceites Faciales: Mitos y Realidades de su Uso

Durante años, los aceites faciales han sido tema de debate en el mundo del cuidado de la piel. Algunos los evitan por miedo a generar grasa o acné, mientras que otros los consideran el secreto para una piel luminosa y saludable. Lo cierto es que entender su funcionamiento puede marcar la diferencia entre un rostro brillante y uno desequilibrado.

Los aceites naturales para cuidados de la piel actúan como un escudo protector que evita la pérdida de agua y refuerza la barrera cutánea. Además, pueden aportar vitaminas, antioxidantes y ácidos esenciales que promueven la regeneración celular. No todos los aceites son iguales: algunos son más ligeros, como el de jojoba o el de marula, ideales para pieles mixtas o grasas, mientras que otros más densos, como el de argán o rosa mosqueta, benefician las pieles secas y maduras.

Sin embargo, uno de los errores más comunes es aplicar el aceite directamente sin una rutina previa. Para aprovechar sus beneficios, lo ideal es usarlo como paso final del cuidado facial, sellando la hidratación del suero o la crema. Esta práctica ayuda a mantener el equilibrio de humedad y potencia los resultados.

Antes de elegir, recuerda que todo lo que debes conocer para darle los mejores usos está en comprender las necesidades específicas de tu piel. Los aceites no son enemigos del cutis graso ni una solución mágica, sino aliados poderosos cuando se aplican con conocimiento y constancia.

EMBRACE YOURSELF TO A HIGHERS JOURNEY

GET IN TOUCH

info@grupoogmios.com