Las mañanas con prisa no tienen por qué traducirse en un rostro apagado. El maquillaje puede ser tu mejor aliado para transformar una expresión cansada en una mirada fresca en cuestión de minutos. Todo comienza con una piel hidratada.
Las mañanas con prisa no tienen por qué traducirse en un rostro apagado. El maquillaje puede ser tu mejor aliado para transformar una expresión cansada en una mirada fresca en cuestión de minutos. Todo comienza con una piel hidratada.